Esta calculadora estima tus recomendaciones diarias específicas de calorías o energía y macronutrientes (proteínas, carbohidratos y grasas) basándose en los datos que proporciones al responder las siguientes preguntas. 1. Atributos físicos. Tu altura, peso, edad y sexo se utilizan para calcular tu tasa metabólica basal, que es la cantidad mínima de calorías que necesitas cada día para que tu cuerpo funcione. Estos datos se introducen en la fórmula de Harris-Benedict, una de las ecuaciones predictivas más utilizadas para el gasto energético en la práctica clínica a nivel mundial. La estimación de calorías calculada en este paso es la cantidad mínima de energía que necesitas para funcionar diariamente. 2. Nivel de actividad física diaria y planificada. Una vez que tu tasa metabólica basal se estima utilizando la fórmula de Harris-Benedict, el siguiente paso es ajustar este número en función de tu nivel de actividad diaria, lo que incluye cualquier sesión de ejercicio planificada. Esto calcula una estimación de cuántas calorías necesitas diariamente para mantener tus actividades y un peso corporal constante. 3. Objetivos físicos. Estos datos contribuyen a personalizar tus recomendaciones diarias de energía, proteínas, carbohidratos y grasas en función de tu composición corporal general. Por ejemplo, si eliges la pérdida de peso como objetivo, tus recomendaciones calóricas diarias se reducirán en 500 kcal. Esto se basa en la sencilla ecuación: para perder 450 g a la semana, necesitas un déficit calórico diario de aproximadamente 500 calorías. De igual manera, si tu objetivo es desarrollar músculo o ganar masa muscular, tus recomendaciones calóricas diarias se incrementarán en 250-500 calorías, respectivamente, ya que el crecimiento muscular es un proceso que consume mucha energía y requiere un aumento de calorías diarias.